El trabajo infantil: Bofetada para una sociedad indolente.
14 septiembre 2006
Por Jaime Restrepo. Director Sistema Atrabilioso.
Jugar con una pelota de fútbol, divertirse con cualquier juguete, aprender, compartir con sus amigos, soñar, imaginarse mundos increíbles: estas son las actividades de la vida cotidiana de un niño… o por lo menos deberían ser parte de la maravillosa rutina de un menor.
Pero las frías estadísticas y las investigaciones que se han adelantado en el mundo, demuestran que el trabajo infantil es una realidad en todo el planeta.
En Colombia el trabajo infantil se ha reducido en los últimos años del 39,5% al 30,6%, lo que significa que de cada 1000 niños, 306 trabajan en diferentes actividades, muchas de ellas reservadas para adultos.
Aunque la reducción genera alguna esperanza sobre la tendencia a disminuir este grave problema social, lo cierto es que no se puede cantar victoria ni eludir semejante situación. Es cierto que, según las cifras oficiales, 373 mil niños entre los 5 y los 17 años ya no están involucrados en ninguna actividad laboral. Pero también es cierto que 3 de cada 10 niños colombianos están condenados a la ignorancia, a la frustración y a la miseria.
Según el DANE, 2 millones 225 mil niños y niñas siguen laborando y de esta cifra, 1 millón desarrollan actividades que corresponden a las peores formas de trabajo infantil.
Aunque el trabajo infantil no es una situación exclusiva de Colombia, lo cierto es que cada sociedad debe enfrentar las consecuencias de su indolencia e incapacidad para ofrecer un mejor futuro a sus nuevos ciudadanos.
En este caso, nuestra sociedad exhibe lo peor de su indolencia y demuestra una total indiferencia frente al futuro: no de otra manera se puede analizar que más de un millón de niños sigan trabajando y por fuera de las aulas de clase.
¿Cómo no señalar a una sociedad que “orgullosamente” muestra como empleadas del servicio doméstico, a niñas recién traídas del campo? Es que el trabajo doméstico es una de las peores formas de trabajo infantil, pues exige dedicación exclusiva y demasiadas horas de trabajo, además del maltrato.
Como si fuera poco, esas niñas reciben un salario inadecuado (cuando se los pagan) frente a la responsabilidad excesiva que se les asigna.
Sin embargo, uno de los aspectos más graves es que el trabajo doméstico impide que las menores accedan a la educación y por lo tanto, esto se constituye en una negación de futuro.
En Colombia, la mayoría de niños que trabajan a tiempo completo, lo hacen en agricultura, servicio doméstico, minería y construcción.
El caso de la minería también resulta aterrador: como los pasillos de las minas son bajos y estrechos, los propietarios de las minas (habitualmente los padres de los trabajadores) encuentran en los niños el tamaño ideal para la explotación de los minerales.
En los socavones, los niños entran encorvados y tienen dificultad para respirar. En las minas, los menores tienen que cargar pesados sacos de carbón a sus espaldas y están expuestos a altos niveles de polvo, enfermedades pulmonares y riesgo de lesiones.
No obstante, existe un problema de explotación infantil mucho peor: los niños combatientes. Según la ONG Save the Children, Colombia es el cuarto país del mundo con más niños soldados. La ONG calcula que hay 14 mil niños reclutados por las organizaciones terroristas, que son entrenados para matar. Esta denuncia ha sido ratificada por UNICEF, organismo que ha condenado a los grupos armados por la utilización de menores en el conflicto colombiano.
Según los expertos, no todo trabajo infantil es cuestionable y aseguran que “algunas tareas apropiadas pueden aportar a los niños, habilidades y responsabilidades, mantener unidas a las familias y contribuir con los ingresos familiares”.
No obstante, en Colombia hay poblaciones que tienen la tradición del trabajo infantil desde los primeros años: incluso hay un municipio en Boyacá que tiene como fuerte la fabricación de ladrillos. Allí los niños comienzan a trabajar desde los 8 años y la deserción escolar es de las más altas del país.
Ante esto, la UNICEF asegura que el trabajo infantil que se presenta dentro de las familias campesinas o artesanas se justifica por la situación de pobreza y en esos casos, los niños pueden trabajar algunas horas e ir a la escuela: el organismo asegura que en esos casos hay que hablar de miseria.
Sin embargo, los expertos aseguran que la pobreza no es la causa del trabajo infantil y citan como ejemplo a China, en donde señalan que ha habido muy poco trabajo infantil en las últimas décadas, porque el Gobierno tomó la decisión política de mandar a los niños a la escuela.
Los mismos expertos concluyen que “donde la educación es obligatoria, disponible y entendida como importante, la proporción de trabajo infantil es más baja”.
Mientras tanto, en Colombia miramos para otro lado cuando un menor es condenado a la miseria, y porqué no decirlo, a la violencia.
Jugar con una pelota de fútbol, divertirse con cualquier juguete, aprender, compartir con sus amigos, soñar, imaginarse mundos increíbles: estas son las actividades de la vida cotidiana de un niño… o por lo menos deberían ser parte de la maravillosa rutina de un menor.
Pero las frías estadísticas y las investigaciones que se han adelantado en el mundo, demuestran que el trabajo infantil es una realidad en todo el planeta.
En Colombia el trabajo infantil se ha reducido en los últimos años del 39,5% al 30,6%, lo que significa que de cada 1000 niños, 306 trabajan en diferentes actividades, muchas de ellas reservadas para adultos.
Aunque la reducción genera alguna esperanza sobre la tendencia a disminuir este grave problema social, lo cierto es que no se puede cantar victoria ni eludir semejante situación. Es cierto que, según las cifras oficiales, 373 mil niños entre los 5 y los 17 años ya no están involucrados en ninguna actividad laboral. Pero también es cierto que 3 de cada 10 niños colombianos están condenados a la ignorancia, a la frustración y a la miseria.
Según el DANE, 2 millones 225 mil niños y niñas siguen laborando y de esta cifra, 1 millón desarrollan actividades que corresponden a las peores formas de trabajo infantil.
Aunque el trabajo infantil no es una situación exclusiva de Colombia, lo cierto es que cada sociedad debe enfrentar las consecuencias de su indolencia e incapacidad para ofrecer un mejor futuro a sus nuevos ciudadanos.
En este caso, nuestra sociedad exhibe lo peor de su indolencia y demuestra una total indiferencia frente al futuro: no de otra manera se puede analizar que más de un millón de niños sigan trabajando y por fuera de las aulas de clase.
¿Cómo no señalar a una sociedad que “orgullosamente” muestra como empleadas del servicio doméstico, a niñas recién traídas del campo? Es que el trabajo doméstico es una de las peores formas de trabajo infantil, pues exige dedicación exclusiva y demasiadas horas de trabajo, además del maltrato.
Como si fuera poco, esas niñas reciben un salario inadecuado (cuando se los pagan) frente a la responsabilidad excesiva que se les asigna.
Sin embargo, uno de los aspectos más graves es que el trabajo doméstico impide que las menores accedan a la educación y por lo tanto, esto se constituye en una negación de futuro.
En Colombia, la mayoría de niños que trabajan a tiempo completo, lo hacen en agricultura, servicio doméstico, minería y construcción.
El caso de la minería también resulta aterrador: como los pasillos de las minas son bajos y estrechos, los propietarios de las minas (habitualmente los padres de los trabajadores) encuentran en los niños el tamaño ideal para la explotación de los minerales.
En los socavones, los niños entran encorvados y tienen dificultad para respirar. En las minas, los menores tienen que cargar pesados sacos de carbón a sus espaldas y están expuestos a altos niveles de polvo, enfermedades pulmonares y riesgo de lesiones.
No obstante, existe un problema de explotación infantil mucho peor: los niños combatientes. Según la ONG Save the Children, Colombia es el cuarto país del mundo con más niños soldados. La ONG calcula que hay 14 mil niños reclutados por las organizaciones terroristas, que son entrenados para matar. Esta denuncia ha sido ratificada por UNICEF, organismo que ha condenado a los grupos armados por la utilización de menores en el conflicto colombiano.
Según los expertos, no todo trabajo infantil es cuestionable y aseguran que “algunas tareas apropiadas pueden aportar a los niños, habilidades y responsabilidades, mantener unidas a las familias y contribuir con los ingresos familiares”.
No obstante, en Colombia hay poblaciones que tienen la tradición del trabajo infantil desde los primeros años: incluso hay un municipio en Boyacá que tiene como fuerte la fabricación de ladrillos. Allí los niños comienzan a trabajar desde los 8 años y la deserción escolar es de las más altas del país.
Ante esto, la UNICEF asegura que el trabajo infantil que se presenta dentro de las familias campesinas o artesanas se justifica por la situación de pobreza y en esos casos, los niños pueden trabajar algunas horas e ir a la escuela: el organismo asegura que en esos casos hay que hablar de miseria.
Sin embargo, los expertos aseguran que la pobreza no es la causa del trabajo infantil y citan como ejemplo a China, en donde señalan que ha habido muy poco trabajo infantil en las últimas décadas, porque el Gobierno tomó la decisión política de mandar a los niños a la escuela.
Los mismos expertos concluyen que “donde la educación es obligatoria, disponible y entendida como importante, la proporción de trabajo infantil es más baja”.
Mientras tanto, en Colombia miramos para otro lado cuando un menor es condenado a la miseria, y porqué no decirlo, a la violencia.
21 comentarios -Mostrar entrada original
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El usuario anónimo dijo...
ATRABILIOSO:
Cada dia se pretrnde que los ni~os sean menos ni~os, existe un afan en hacerlos adultos antes de tiempo y de esto mi querido Atrabilioso nadie se ocupa, lo considero un tremendo abuso.
Observe ese afan de "salir de los ni~os" ,cada dia mas tiernos son enviados a los "jardines" infantiles ,sin ningun escrupulo se les saca del hogar antes de tiempo,criaturitas de tres a~itos ya en ajetreos "escolares" por comodidad de los padres,visten uniformes, van a aulas y tienen sus maestras, a estos si se les acabaron los sue~os bien pronto, se les esfumo la fantasia , estan puestos en estado de "maduracion precoz".
Se inventan ventajas de toda indole escondiendo la verdadera realidad, estorban para las actividades de sus padres y es mandatorio zumbarlos con todo descaro a una vida , para ellos completamente anormal y absurda,ha florecido la industria de los jardines infantiles, angelitos que inician su vida con llantos, presiones hasta para que no lloren, siendo el llanto su natural comunicacion , su unica inocente protesta por haber sido rrancados de la tibieza de sus madres y privados del calor de hogar.
Sin siquiera proponerselo ,muchos padres modernos que se creen casi perfectos estan abusando de sus crfaturitas, los estan sometiendo al gran trabajo de la "adultez",robandoles sus sue~os, acortando sus fantasias , llenandose de estres antes de tiempo....
...si a usted no le parece....a mi, si...
Visor
septiembre 14, 2006 6:17 AM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA VISOR:
Cuando yo era un niño (hace muchísimo tiempo, pero todavía me acuerdo) mi madre decidió matricularme en el colegio: tenía 3 años e ingresé a kinder. Mi padre estaba de acuerdo, aunque las familias pusieron el grito en el cielo por semejante abuso.
Unas décadas después, mi hija ingresó al colegio cuando tenía año y medio, y ahora se ven los resultados positivos de esa decisión, pues en el caso particular, el colegio que escogimos enseña mediante la lúdica y ha resultado bien importante para la vida de ella.
En contraposición, el hijo de una gran amiga ingresó al colegio a los 7 años y la ausencia de preescolar ha sido un obstáculo enorme en diferentes actividades escolares y personales del menor.
Supongo que hay padres que utilizan los jardines infantiles no escolarizados como mecanismo para salir de los niños, pero la visión que tuvieron mis padres en su momento, y nosotros actualmente, es que le estamos dando herramientas para crecer y desempeñarse mejor, no solo académica, sino social y culturalmente.
El colegio, mi querido Visor, no puede ser considerado solo como un sitio de adiestramiento o adoctrinamiento en donde van a adquirir una cantidad de información: por lo que hemos vivido, el colegio es un centro interesantísimo de socialización en donde se trabajan las fortalezas de los niños en múltiples aspectos, sin despertar en ellos la animadversión por el colegio. De hecho, con mi hija hay problemas cuando está enferma y decidimos no enviarla a clases.
Lo importante en esto es analizar detenidamente el colegio en el que vamos a matricular a nuestros hijos, que sean personas y no números en un listado, que los profesores y directivos sepan quiénes son los padres de cada alumno y otra serie de factores que los van a nutrir.
Por ejemplo: hay colegios que no envían tareas a casa, porque enseñan a repartir el tiempo entre lo académico (laboral para usted) y la familia o los amigos (la casa).
Me hubiera servido de mucho que mi colegio hubiese hecho esa distinción, pues la casa debe ser sinónimo de afecto, DIÁLOGO, recreación, actividades grupales y un largo etcétera; y no de sucursal de una empresa.
Gracias por sus comentarios.
septiembre 14, 2006 9:22 AM
Stella dijo...
Los niños hoy en día son considerados un estorbo para las mujeres, un gasto para los hombres y algo indiferente para la sociedad en general.
Hoy es muy común escuchar a las mujeres que primero su carrera y su figura a un hijo.
La mayoría de los hombres estan tan ocupados haciendo dinero (según ellos para darle comodidades a sus hijos)que no les queda tiempo para compartir con ellos.
También vemos el interés de cuidar perros antes que niños. (Una forma clara de mostrar nuestra poca inteligencia, ya que es más facil cuidar un perro que educar un niño.)
Querer ignorar que nuestra niñez(desde que se está en el vientre de la madre hasta aprox 7 años)es lo que moldea la personalidad del ser humano es como ignorar que la tierra gira alrededor del sol.
Yo creo que la sociedad está afilando cuchillo para su propia garganta. La falta de sentimientos, la indiferencia, el egoismo y sobre todo ese AFAN de parecer mejor que otro son las desgracias del mundo pero en especial de nuestro país.
Hace dos días escuchaba la noticia que de 100 mujeres solo 2 se sentian contentas con ellas mismas.
Eso ya es el colmo de la desgracia. Una mujer que no se sienta contenta con sus atributos es una bomba de tiempo. En ocasiones siendo mujer hablo mal de las mujeres porque se lo merecen. Ya es suficiente con la insensibilidad de los hombres para que las mujeres perdamos el corazón.
Esos niños sometidos a toda clase de injusticias es el reflejo de una sociedad corrompida. El reflejo de unas madres desnaturalizadas y el reflejo de unos hombres irresponsables.
Posiblemente le echemos la culpa a la pobreza, pero la mayoría de esos niños tienen unos padres que están en casa sin hacer nada, esperando que el "hombrecito" de la casa les lleve la comida.
Aquí cito unas fraces de Cobbett.
"Hay comparativamente muy pocas mujeres que no sienten el amor maternal, y debes desconfiar en absoluto de aquella a quién no le gusten los niños, y no casaros con ella de ningún modo. Existen, sin embargo, algunas, por fortuna muy pocas que no pueden soportar a los niños. No he visto nunca a un hombre de verdadero valer a quién le disgustasen los niños, ni mujer que, no amandolos fuese buena para algo.
He conocido algunas mujeres que pensaban así, durante el curso de mi vida y me han causado tanta repulsión, que no he sentido el deseo de verlas por segunda vez"
Eso prueba también que la inteligencia de los hombres va de mal en peor.
septiembre 14, 2006 9:44 AM
El usuario anónimo dijo...
ATRABILIOSO;
Despertar a temprana edad, puede ser todo lo social que lo podamos ver , pero no es el siclo natural, las aves esperan a que sus poyuelos emplumen y sepan al menos usar sus alas, los gatos ense~an a sus crias a jugar con los ratones y solo les dan de "alta" cuando los pueden cazar por si mismas,de la misma manera los leones llaman a calificar servicio a sus cachorros cuando puedas desnucar un venado sin su ayuda, los Dragones mismos, se aprestan a soltar a sus crias solo cuando estas se atrevan a sacarle la lengua al "majestuoso",los humanos hemos inventado mil disculpas para echar a volar a nuestros infantes , a una maduracion temprana, y luego nos quejamos, acortando la ni~ez apresuramos la llegada de una adultez azarosa por lo extemporanea, de esos estres, vienen las acciones de inmaduros adultos, los maduraron biches, de ahi salen a buscar drogas, si dejaron tan pronto de so~ar , de jugar con carritos y mu~ecas y los lanzamos de pronto a un mundo de adultos,llegaron tan pronto a la madurez, que se sienten frustrados y azorados,prueban drogas y otros juguetes de adultos, creando problemas que antes no teniamos, fijese que hasta aprenden a fumar...
Si aun no lo cree asi....yo si...
Visor
septiembre 14, 2006 10:01 AM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA STELLA:
No creo en las generalizaciones y por lo tanto, estimada Stella, no creo que TODOS los niños sean considerados estorbo o gasto.
Eso si: estoy de acuerdo en que muchas mujeres ponen como prioridad la carrera y la figura o muchos hombres piensan solo en el dinero. Le contaré: cuando estaba a punto de casarme, prácticamente no dormía pensando justamente en el dinero: si de soltero no me alcanzaba, de casado eso sería un caos… el matrimonio arregla ese temor, porque curiosamente el dinero rinde mucho más.
Las pesadillas volvieron cuando estábamos en embarazo: si el dinero alcanzaba para vivir cómodos, pues un niño implica muchísimos gastos y creía que sería más difícil.
La vida me enseñó, a las malas, que el dinero es algo accesorio con un hijo: me enfermé, dure varios años como un vegetal y la provisión en la casa nunca faltó, gracias a Dios.
Sin embargo, me declaro culpable del asunto de pensar en el dinero como único elemento para ofrecer una excelente calidad de vida a un niño. No obstante, la vida misma se encargó de mostrarme que era todo lo contrario.
Coincido también en el asunto de la competitividad: veo con preocupación a esos pobres niños que tienen que competir en el colegio para ser los mejores (las medallas y los reconocimientos son lo importante), los ponen a competir en deportes, en música y en todo lo que a sus despreciables padres se les ocurre y luego, cuando llega la adolescencia, esos competitivos entran en rebelión. Y después viene el llanto y el rechinar de dientes.
Gracias por sus comentarios.
septiembre 14, 2006 10:13 AM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA VISOR:
Respeto su opinión, pero no la comparto. Que un niño ingrese al colegio a temprana edad no significa que se esté apresurando su vida ni mucho menos: de hecho, aprenden muchas cosas, sociales, culturales y académicas, que les son de mucha utilidad en su vida.
Hay que hacer ciertas diferencias: la responsabilidad de la formación no es del colegio sino del hogar. Los valores son entregados desde la casa y no en el colegio.
Fíjese que el esquema de los niños hasta los 7 años en casa es el que hemos visto aplicado en aquellos que dirigen y han dirigido a Colombia en las últimas décadas, y el resultado ha sido... digamos que bastante mediocre.
De otro lado, que un niño ingrese a temprana edad al colegio no lo lleva a fumar... por el contrario, algunos aprenden a fumar ya bastante viejos, diga usted a los 25 años, y por razones diferentes.
Pero lo cierto es que el alcoholismo y las primeras etapas modernas de la drogadicción se presentaron en niños con escolarización tardía...
Ni hablar de personajes que solo pisaron un colegio hasta edades adultas y llegaron a ser presidentes de ingrata recordación.
A César Gaviria, por ejemplo, le asignaron niñera en la casa hasta los 8 años y después lo enviaron al colegio... ¿será un buen ejemplo?
No se mi querido Visor... creo que la vida es muy corta y que hay que dar (recibir) todas las herramientas posibles para un buen desempeño (no hablo de éxito económico o cosas por el estilo) en la vida.
Un abrazo.
septiembre 14, 2006 10:21 AM
virgilio dijo...
No quise poner el enlace porque a muchos les da "tedio" abrirlos. Con el permiso de atrabilioso aprovecho el espacio.
Hoy quiero hacer extensiva la "bofetada", para quienes no se preocupan la niñez en Colombia, con los siguientes aspectos:
El 40% de la población colombiana es menor de 18 años, es decir 16 millones de personas.Según el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), :
6.5 millones viven en la pobreza absoluta y de éstos más de un millón se halla en situación de miseria.
Más de un millón y medio de niños menores de 18 años no asiste a la escuela y cerca de dos millones de niños trabajan.
Se estima que 361 niños y niñas de cada mil sufren algún tipo de maltrato.
Se presentan en promedio 12.202 casos de explotación sexual en un año.
En julio de 2005 el Consejo de Seguridad de la ONU, aprobó por unanimidad una medida para erradicar la violencia contra los niños atrapados en conflictos armados del mundo. Las Farc en Colombia, será el grupo insurgente al que se le hará seguimiento. Por primera vez la organización internacional establece un régimen formal y estructurado con el fin de atacar esta problemática. Dentro del sistema de control e información de la ONU se registrarán las violaciones de los derechos de los niños, incluyendo los casos de muerte o mutilación, el reclutamiento de menores de edad como soldados, el secuestro o negación del acceso a ayuda humanitaria, entre otros flagelos.
Según UNICEF y Human Rights Watch, 11.000 niños están vinculados a grupos armados al margen de la ley.
Según el Departamento de Nacional de Estadística (DANE) la mortalidad infantil en colombia es de 28 por 1000.
Según UNICEF en Colombia hay 7 millones de niños en pobreza, 1 millon de niños en miseria, 3 millones de infantes no tienen acceso a la salud y 2.5 millones no tienen acceso a la educación.
De acuerdo con la Organización Internacional de Migraciones (OIM), el 26% de los niños y niñas entre 6 y 11 años no asisten a la escuela, igualmente, los/las jóvenes entre los 12 y 17 años.
Para el Consejo de Seguridad de la ONU, no sólo es ilícito sino también inmoral condenar a los niños a ser víctimas y protagonistas de las guerras. Su Resolución 1314 de 2000 ratifica la responsabilidad que les cabe a los gobiernos, los grupos rebeldes y el sector privado de garantizar la protección de los derechos fundamentales de niños y niñas en tiempos de guerra, así como en las épocas de paz.
saludos
septiembre 14, 2006 10:39 AM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA VIRGILIO:
Mil gracias, porque ningún colombiano se salva de la bofetada. Y es importante porque el asunto requiere máxima atención y darle prioridad ante la inminente desgracia que se avecina con estos niños que pronto serán adultos dispuestos, en muchos casos, a cobrar venganza por los sufrimientos y por la indolencia social.
Un abrazo.
septiembre 14, 2006 10:59 AM
El usuario anónimo dijo...
ATRABILIOSO:
Si nos alejamos del ambito personal y entendemos como ni~os que debemos proteger tambien a los de estratos mas alejados, se dara cuenta de lo que le comento, esas criaturas no tendran jamas la oportunidad de asistir a buenos colegios, menos aun a las universidades, el acortarles su ni~ez de nada les valdria en la practica, lo que les traeria riesgos en su comportamiento afectivo, a falta de dienro para pagar esos pre-kinder o jardin de infantes su opcion seria quedar al cuidado de personas no entrenadas y dudosa salud mental, el ni~o debe estar al cuidado de sus padres hasta lograrr su "madurez infantil" lanzarlos tan pronto de sus hogares les trae serias depresiones.
La diferencia que anota , es producto de la falta de reglamentaciones, en USA no se aceptan ni~os para primer grado menores de 6 a 7 a~os, con pensum uniforme, asi no habra mayores desbalances en el comportamiento academico de los ni~os, se observan detenidamente y quienes requieren mayor atencion son precisamente los "madurados biches", muchos reciben educacion especial, pero mas tendiendo a que se comporten como " normales " para su edad, aunque se cultiven sus dotes extraordinarias, que los hay.
Indudablemente quienes ingresen a tan temprana edad tendran mas tiempo de aprender muchas cosas, sociales, culturales y académicas, que les son de mucha utilidad en su vida, pero tambien tendran menos tiempo para recibir el amor, el afecto , la comprension, darse cuenta de la proteccion y direccion de sus padres, grabar en sus mentes el ejemplo y comportamiento de sus progenitores, seguiran los ejemplos y ma~as de sus mentores,o cuidadores, adquiriran sus modales , luego en sus hogares se sntiran como "injertos", creandose en ellos cierta zozozobra,tension e inseguridades , que de alguna manera mas tarde o mas temprano buscaran aliviar con vicios y comportamientos rebeldes.
No necesitamos compartir estos sentimientos, el solo exponerlos lo mas claramente posible para el debate podria ser el objetivo de este "enfrentamiento".
....si no no lo entiende asi....yo si....
Visor
septiembre 14, 2006 11:27 AM
Jaime Ruiz dijo...
Sobre el tema de la discusión, me quedo pensando en lo extraño que es todo, en lo que anda pensando la gente. Si un niño de tres años no va al colegio y es hijo único, ¿qué hace? Podría ser que estuviera en casa viendo la televisión o el DVD, pero eso parece peor que estar en el colegio. Podría ser que tuviera una niñera pendiente de jugar con él, pero eso supone que se trata de un hijo de padres ricos, cosa que no es lo más frecuente. Y aun tendría una grave carencia de relación con otros niños. Creo que la escolarización es la mejor solución: está con otros niños, comparte infinidad de juguetes que a menudo escogen personas con más noción que los amigos de los padres (que suelen comprar los regalos que expresen su rango social y no los que sirvan para desarrollar la inteligencia del niño) y tiene a una persona especializada vigilándolo.
Por otra parte está el precio de la autonomía y la carrera laboral de los padres, que no pueden estar dedicados todo el día a los hijos. Creo que en otras épocas los niños de clases medias eran mucho menos felices, salvo por tener media docena de hermanos o más, lo cual de todos modos es una catástrofe para la sociedad (tal vez Latinoamérica no habría tenido problemas de violencia si su población no se hubiera multiplicado por diez en menos de un siglo). Claro que puede darse el caso de que los padres no los quieran o sean malos padres, pero ¿qué ventaja habría con no ir al colegio y sí estar con esos padres? ¿Es que en otras épocas no había malos padres?
Esto se puede relacionar con el tema del post de hoy: donde deben estar los niños es en la escuela, ni en la calle ni trabajando. En todo caso esa idea de "niños" se presta a excesos, no es lo mismo que haga un trabajo pesado un niño de 9 años a que ayude en una tienda un "niño" de 16. El problema no es tanto que un niño trabaje sino que no estudie, que haga una jornada completa o que haga tareas pesadas y agotadoras.
Pero eso sólo se remedia con el desarrollo económico y éste supone muchas cosas: sobre todo el cese del parasitismo de una parte de la sociedad.
septiembre 14, 2006 11:34 AM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA VISOR:
Usted ya está haciendo una diferenciación importante: los niños que no tienen facilidad de acceso a la escolarización, lo que resulta muy distinto a la generalización que usted propuso: “Observe ese afán de "salir de los niños" ,cada día mas tiernos son enviados a los "jardines" infantiles ,sin ningún escrúpulo se les saca del hogar antes de tiempo, criaturitas de tres añitos ya en ajetreos "escolares" por comodidad de los padres, visten uniformes, van a aulas y tienen sus maestras, a estos si se les acabaron los sueños bien pronto, se les esfumo la fantasía , están puestos en estado de maduración precoz”.
Un tema es la escolarización temprana y otra muy distinta es la imposibilidad para muchos sectores de acceder a ella: de hecho, comparto su molestia con la imposibilidad ”esas criaturas no tendran jamas la oportunidad de asistir a buenos colegios”, pero esto confirma la importancia de la escolarización desde los primeros años, la que parece usted compartir ahora.
Yo, mi querido Visor, no se si lo indicado sea dejarlos al cuidado de los padres maltratadores, que brindan un pésimo ejemplo de vida y que solo ofrecen espectáculos desagradables de conductas altamente reprochables… pero en muchísimas regiones del país, esa es la única opción porque no hay un jardín infantil cercano.
Ocurre también que la escolarización, lo que en Colombia se conoce como preescolar, es un juego en el que se aprende, se divierte y se socializa, cosa que choca con la antigua “educación” de memorización y tareas para desarrollar en la tarde, en la noche y en la madrugada.
Por el contrario, el tema está debidamente reglamentado y hay innumerables tratados psicológicos y pedagógicos sobre los beneficios para EL NIÑO, de esa escolarización temprana.
Fíjese que usted aborda el tema del primer grado para niños menores de 7 años, y resulta que aquí en Colombia esa reglamentación es igual: la edad para ingresar a primer grado es de 7 años. Lo que ocurre es que se confunde la etapa preescolar (juegos, aprendizaje, socialización y múltiples beneficios) con la etapa de básica primaria.
En cuanto al tiempo, desde mi perspectiva es fundamental que desde niños aprendan a que existen momentos para cada situación, lo que les permite un desarrollo mejor de sus actividades futuras. Hay muchos adultos que no tienen la menor idea del manejo del tiempo, se convierten en adictos al trabajo (o a la pereza) y terminan por enfocar la vida a un solo aspecto, alcanzando el triunfo en ello, pero convirtiendo todos los demás componentes de la vida en un absoluto fracaso.
De igual forma, recibir amor, afecto y comprensión, no puede medirse por el número de minutos dedicados a ello, pues estos aportes fundamentales pueden darse mientras el niño abre en su vida, otras posibilidades positivas para su desempeño en la vida: de hecho, si un niño permanece en casa las 24 horas no significa que reciba más afecto y amor y, por lo que he visto, ocurre todo lo contrario.
Un abrazo y sus comentarios siempre son bien recibidos como puntos importantes para un buen debate.
septiembre 14, 2006 12:19 PM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA JAIME RUÍZ:
Me hizo recordar los primeros años de mi hija: me moría de la ira cuando le regalaban cocinitas, ollitas, planchitas y todas esas cosas que marcan a los niños con destinaciones específicas de acuerdo al género.
Ciertamente el punto esencial es que los niños deben tener acceso a la educación. En cuanto a la diferenciación por edades, estoy de acuerdo, siempre y cuando, como usted anota, tengan la posibilidad de la escolarización.
Gracias por sus comentarios.
septiembre 14, 2006 12:19 PM
El usuario anónimo dijo...
ATRABILIOSO:
Si aplicamos sus razones a "nuestros niños" y vemos su temprana escolarizacion como un buen pricipio para su vida de adultos,como universitarios y profesionales, tendremos que concluir en un perfecto acuerdo, nada mas logico,iniciar su entrenamiento intelectual desde la mas temprana niñez ,cabria preguntar ,a esos niños marginados de esa actividad ,porque no dejar que se "entrenen"en la actividad que les tocara desarrollar durante su vida ? obviamente cuanto mas temprano inicien su vida laboral,mas experiencia y conocimientos obtendrian,por que entonces escandalizarse de algo que practicamente seria lo mismo que dejar que nuestros "parvulos" solo por ser nuestros y con tendencia a la intelectualidad les sea no solo benefico sino hasta recomendable ese temprano entrenamiento, mientras "los otros" son el objetivo de escandalosas estadisticas y huecos comentarios?...
...si no lo ve asi....yo si...
Visor
septiembre 14, 2006 1:14 PM
Dragón Negro dijo...
Yo quise que en sus espacios libres fuera de aulas y de tareas fueran a clases de teakwondo, los afilé a la liga, y chao les gusto fué el piano, luego al computador saben más que cualquiera, luego la bici y la patineta, luego natación, luego volleyball, luego danza y ahora están engorilados con gamecube.
Lo unico que quise fué las artes marciales, lo demás ha sido iniciativa de ellos y no se les restringe el acceso a actividades propias de su edad.
Iniciaron prejardín a los 2 años cada uno, y el niño, algo piloso fué "ascendido" de jardin "a" a transición. Ahí van y yo no les noto cercenada su niñez, por el contrario las actividades las adelantan con entusiasmo y no hay que estar "arriandolos" como a titere de traqueto para que firme lo que se necesite para pasar por encima de las victimas y del estado social de derecho.
septiembre 14, 2006 1:53 PM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA VISOR:
Veo que continúa la confusión: uno de los muchos componentes del preescolar es lo que usted denomina entrenamiento intelectual. Sin embargo, el preescolar va mucho más allá e incluye de manera sustancial los juegos, la socialización, el trabajo de relaciones interpersonales, etc. Ante todo es, para los niños, diversión dirigida y realizada por expertos y en esa diversión (lúdica) se incluye también algo de conocimientos.
Entonces, difícilmente se puede relacionar un trabajo (hacer ladrillos, fabricar balones de fútbol, sumergirse en los socavones de las minas, servir de empleadas domésticas, etc.) con una actividad que en todo sentido respeta la niñez y las etapas de un menor, como es la escolarización desde edad temprana.
Sin embargo, ocurre con frecuencia que los malos recuerdos de la escolarización propia nos influyen para juzgar los actuales esquemas de educación: uno de los asuntos más difíciles para los colegios tiene que ver con manejar en un solo individuo, varias experiencias muy diferentes y con periodos de tiempo que las hacen distintas: los padres juzgamos por experiencia propia y a partir de ella, asumimos las expectativas frente a la educación. No obstante, las realidades resultan muy gratas y poco a poco se reacomoda el pensamiento frente a la experiencia que se vive a través de los hijos.
Un abrazo.
septiembre 14, 2006 3:39 PM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA DRAGÓN NEGRO:
Evidentemente las actividades adicionales, cuando son por iniciativa propia y sin ese componente de competencia que deja exhaustos a los menores, resultan interesantes.
Usted menciona un aspecto bien importante: no hay que arriarlos… las propuestas educativas y lúdicas actuales tienen componentes que atraen a los menores y nos lleva a la inevitable comparación con lo que podíamos hacer para evitar asistir a clases.
Gracias por sus comentarios.
septiembre 14, 2006 3:40 PM
El usuario anónimo dijo...
ATRABILIOSO & DRAGON NEGRO:
Sus razones son bien claras y hasta entendibles ,corresponden a padres, con corazon de piedra medio hipotecado,las mias son de un abuelo que oye los reclamos de sus nietos que añoran por las largas y divertidas jornadas de pesca, las escapadas a comer conos,a elevar cometas,a cazar lagartijas, a jugar con ranas, a reirnos como locos, asuntos mucho mas divertido que jugar con las maestras, a cantar boberias, a modelar tonterias en plastilina , a rezarle a la bandera ,mientras afuera el abuelo contempla inerme como la "escolarizacion temprana" le roba a sus nietos y les acorta su niñez...aunque ustedes digan que no.
...si no lo creen asi....yo si...
Visor
septiembre 14, 2006 4:33 PM
Dragón Negro dijo...
Mi corazón no es de piedra, tampoco es grande y mucho menos tengo una mano dura.
A mi me encanta la caceria y la pesca, el camping, observar los reptiles, los insectos, las aves, etc, disfrutar flora y fauna, y quisiera ir con ellos a soltar los perros tras de un tinajo o meterlos en una cienaga para enseñarles a cazar barraquetes, ó a un arrozal a cazar la perdíz o la torcaza, pero en este gran ralito caguanizado, mi querido paisano, eso está vedado para reinsertables y secuestrados.
septiembre 14, 2006 4:44 PM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA VISOR:
Cuando se emiten juicios de semejante dimensión, padres con corazón de piedra, podría pensarse en remordimientos de conciencia por lo que se dejó de hacer.
Sin embargo, más allá del supuesto corazón de piedra hay una claridad sobre lo que son boberías, como usted las llama, y las que no lo son.
Finalmente, los abuelos tratan de enmendar los errores que cometieron con sus propios hijos y ese es un asunto que TODOS tendremos que enfrentar en su momento.
Lo cierto es que la niñez no es un enorme espacio de ocio, sino un APRENDIZAJE, entre otras cosas, del manejo del tiempo para DISFRUTAR cada actividad como un regalo de Dios y eso, lejos de acortarles la niñez, los hace reconocer cada actividad como algo diferente y maravilloso.
Gracias por sus comentarios.
septiembre 14, 2006 5:00 PM
Stella dijo...
No se generaliza se habla del común. Tenemos que recordar que la pobreza tiene en Colombia un porcentaje que supera bien lejos el 50%. Entonces más de la mitad de los niños, muchisssimo más no van a guarderias con personas especializadas. Hay niños privilegiados, que tienen la suerte de haber nacido en hogares con padres que les brindan amor, educación, alimentación etc.etc.
PERO, más del 70% no tienen ésta suerte y la culpa no es de los niños:
1-USTED NO ELIGIÓ NACER.
2-USTED NO ELIGIÓ A SUS PADRES.
3-USTED NO ELIGIÓ EL LUGAR DONDE NACIÓ.
No está bien tomar los comentarios como personales. Debemos recordar que se comenta del artículo publicado y que los que visitan tienen formas de ver la vida diferente porque son historias diferentes. Si ustedes son padres privilegiados BENDITO SEA DIOS. Pero la mayoría de los niños no tienen esa suerte.
Yo le encuentro parte de razón a Visor en el sentido de que antes lo que hacen las guarderias lo hacian los padres. Posiblemente para muchos padres sea un orgullo mandar a un hijo de un año a una guardería porque ellos estan muy ocupados haciendo dinero o porque se sienten incompetentes para hacerlo. Yo creo que es más bien por no estar menos que los demás.
La mayoría de los temores que tenemos los adultos por no decir todos, fueron inculcados en la niñes.
El mayor temor del que sufre el ser humano es el abandono. Ese temor empieza cuando es alejado de la madre. Ese temor al abandono es representado cuando se es adulto por los CELOS.(inseguridad) lOS CELOS ES TEMOR A SER ABANDONADO.
Porque cree usted que ahora hay tanta inseguridad tanto en hombres como en mujeres? Porque tanto esfuerzo para agradar al otro?
Estamos hablando de sus hijos o estamos hablando de los pobres que tuvieron la desgracia de nacer?(un aborto tiene mejor suerte) de los que tuvieron la desgracia de nacer de padres drogadictos, enfermos, miserables? De los que tuvieron la desgracia de nacer en un país que no brinda oportunidades porque las oportunidades te las tienes que fabricar?
O si éste país es tan lindo y tan positivo porque se van para USA a vivir? porque no se quedan aquí haciendo patria?
Son tantas las oportunidades que brinda USA que muchos profesionales se van a lavar platos e inodoros y viven mejor que si estuvieran aquí en oficina con aire acondicionado ejerciendo su profesión.
Aterricemos...
septiembre 14, 2006 9:35 PM
Sistema Informativo Atrabilioso dijo...
NOTA DEL DIRECTOR PARA STELLA:
Es un tema sensible y, en especial, cuando se es cuestionado de manera injusta y directa por un gran amigo.
Pero esa línea que tomó este foro, resulta interesante para los nuevos padres, aquellos que quieren construir una familia y que, como todos sabemos, no desprecian ninguna orientación u opinión frente al tema.
Fíjese que usted también incurre en una generalización cuando solo da tres motivos para que lleven a un niño a un jardín infantil con escolarización: "Posiblemente para muchos padres sea un orgullo mandar a un hijo de un año a una guardería porque ellos estan muy ocupados haciendo dinero o porque se sienten incompetentes para hacerlo. Yo creo que es más bien por no estar menos que los demás".
Introducir en la escolarización a un hijo no es motivo de orgullo y se que muchos lo hacen por un motivo mucho más concreto: es abrirles un campo, una oportunidad mayor para que tengan posibilidades más firmes en el futuro y esas posibilidades las ofrece justamente un centro de educación preescolar adecuado a las necesidades y expectativas tanto de los padres como de los niños.
Eso de la apariencia resulta un juicio temerario al ser generalizado.
Pero vamos más al fondo: si las actuales generaciones adultas entraban al sistema escolar hasta los 7 años, ¿porqué se siguen presentando sentimientos de abandono, inseguridades y muchas cosas más en esas generaciones?
Creo entonces que el problema no es la edad, sino el escaso aporte que se hace desde casa para fortalecer la seguridad de un menor. Los problemas que usted menciona en los adultos, curiosamente, se dan en aquellos que ingresaron a escolarización tardía, por lo cual, las realidades que se presentan demuestran que la situación no resiste un análisis desde esa óptica.
La propuesta inicial del artículo era la explotación laboral, pero surgió el tema de la escolarización y quien lo propuso también estableció enlaces entre lo afirmado en la columna y la escolarización.
Lo que demuestra todo lo ocurrido en el foro de hoy, es que el tema es tan sensible que resulta mejor desviarlo para ocuparse de otros asuntos.
Finalmente le recuerdo que la pobreza en Colombia está unos pocos puntos por debajo del 50%.
Gracias por sus comentarios.
septiembre 14, 2006 11:45 PM