La perversa costumbre de los nuevos plazos
31 enero 2006
Por José Fernando Bonilla B. Editor General Sistema Atrabilioso.
Sin querer entrar en polémicas acerca de los beneficios, bondades, amenazas, oportunidades, etc., que presupone la firma del acuerdo del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TLC), hay un punto al cual debemos prestar especial atención si queremos ser más competitivos y eficientes en estos tiempos de globalización y apertura. Me refiero al acatamiento de los plazos pactados para cumplir una labor encomendada o para implementar algo que ordena el Gobierno a través de un decreto, acuerdo o circular.
En Colombia estamos acostumbrados a dejar todo para última hora. Bien sea por falta de adecuada planeación o simplemente porque pensamos que podemos terminar algo en el último minuto, lo cierto es que pareciera que a los colombianos nos encantan las largas filas, las carreras contra reloj y la adrenalina de hacerlo todo en el último minuto. Esta característica implica que, cuando se acerca la hora límite para cumplir con algo, empiezan las carreras.
También estamos acostumbrados a negociar una extensión de plazos cuando vemos que no podemos cumplir con un compromiso, que dicho sea de paso, lo hemos dejado para última hora. Nos escudamos en lo comprensivos que son nuestros conciudadanos, en la costumbre generalizada de que ser un poco incumplido es normal y en la falta de acatamiento de los organismos del Estado que son tan o más incumplidos que las empresas privadas.
Finalmente, nos hemos acostumbrado en algo más complejo: en que el Gobierno siempre extiende plazos adicionales. Veamos algunos ejemplos de "extensión de plazos":
En Colombia estamos acostumbrados a dejar todo para última hora. Bien sea por falta de adecuada planeación o simplemente porque pensamos que podemos terminar algo en el último minuto, lo cierto es que pareciera que a los colombianos nos encantan las largas filas, las carreras contra reloj y la adrenalina de hacerlo todo en el último minuto. Esta característica implica que, cuando se acerca la hora límite para cumplir con algo, empiezan las carreras.
También estamos acostumbrados a negociar una extensión de plazos cuando vemos que no podemos cumplir con un compromiso, que dicho sea de paso, lo hemos dejado para última hora. Nos escudamos en lo comprensivos que son nuestros conciudadanos, en la costumbre generalizada de que ser un poco incumplido es normal y en la falta de acatamiento de los organismos del Estado que son tan o más incumplidos que las empresas privadas.
Finalmente, nos hemos acostumbrado en algo más complejo: en que el Gobierno siempre extiende plazos adicionales. Veamos algunos ejemplos de "extensión de plazos":
La implementación del cobro de multas a los buses que no tienen regulador de velocidad, fijada desde marzo de 2005 y cuyo plazo se vencía en septiembre.- La entrega de las obras de Transmilenio en Bogotá: diciembre de 2005.
- La chararrización de los buses viejos: diciembre de 2005.
- El cambio de las cédulas de ciudadanía: diciembre de 2006.
- La recuperación del espacio público: la promesa viene desde hace tanto....
Si el Gobierno otorga un nuevo plazo cada vez que no podemos cumplir con la fecha fijada, nunca cambiaremos nuestra manera de actuar. Una cosa es que existan circunstancias extremas que impidan la implementación de algo y otra muy distinta que sea costumbre la extensión de los plazos. ¿Falta de análisis o pago de favores y entrega de prebendas a ciertos sectores económicos? Me inclino por los dos últimos puntos. O el Gobierno tiene negociadores incapaces o la empresa privada tiene unos que son unas fieras para esa labor.
Ser incumplidos es algo que no nos hace competitivos. Una entrega de un pedido fuera de la fecha límite genera malestar al cliente, mal nombre a la empresa vendedora y hasta multas en caso de existir una póliza de cumplimiento. Debemos concentrarnos en cambiar esa costumbre y a entregar en o antes de la fecha límite aquello a lo cual nos comprometimos. Un buen producto o servicio no es sólo apariencia, detrás encontramos un excelente soporte al cliente, puntualidad en los despachos o entrega de trabajos, calidad y garantía.La buena y adecuada planeación es base fundamental para desarrollar la sana costumbre del cumplimiento de objetivos, metas y plazos. El mundo no nos va esperar. O nos ponemos a tono con el ritmo de trabajo que impera hoy en día o la competencia nos va a comer vivos. Señores del Gobierno, ustedes deberían dar ejemplo.
4 comentarios -Mostrar entrada original
Ocultar comentarios
El usuario anónimo dijo...
Creo que al autor del articulo le quedó pequeña la página para describir la forma como el Gobierno Nacional maneja con TORPEZA la planeación de sus politicas.
Algunos puntos importantes y en los que resulta ilógico admitir que el Gobierno está sometido bajo las condiciones de unos narcoterroristas: Las exigencias de los paras en cuanto a las desmovilizaciones; supuestamente el cronograma daba plazo hasta el 31 de diciembre de 2.005 y hoy por hoy continuan con el "cuentico"; peor aún resulta aguantar a los Miserables de las Farc con sus mentiras para exigir un acuerdo humanitario, y aplazar las "negociaciones".
Ni hablar de los "aplazamientos" en la justicia. La inerte y amañada Ley de Justicia y Paz, en espera a dictar sentencia a quienes salvajemente han acabado con el país.
enero 31, 2006 11:29 AM
Crítico dijo...
Para el anónimo de las 11:29 AM,
Es imposible resumir en una página todos los casos de aplazamiento en que se ha visto involucrado el Gobierno. Gracias por sus aportes.
enero 31, 2006 12:30 PM
Realista dijo...
Atrabilioso:
hace dias estoy por dar una sugerencia: aumenten el tamaño en la letra de los articulos, el ultimo parrafo esta ok en tamaño, pero solo el ultimo.
Por lo demas, dejenme decirles que los articulos continuan siendo una berraquera.
enero 31, 2006 8:59 PM
Atrabilioso dijo...
NOTA A REALISTA:
Hemos tenido inconvenientes para "anclar" el tipo de letra: nosotros actualizamos la página con Verdana 12, pero en muchos navegadores sale Times u otro tipo de letra.
Ese problema lo estamos solucionando y esperamos que la próxima semana, nuestros usuarios no encuentren esa dificultad.
Un abrazo y mil gracias por sus sugerencias.
febrero 03, 2006 9:56 AM